Coadem repudia beligerância, demagogia e populismo na América
Guaiaquil, Equador, 27/03/2008 – Ao discursar hoje (27) na reunião do Conselho de Colégios e Ordens de Advogados do Mercosul (Coadem), o presidente do órgão, o advogado brasileiro Sergio Ferraz, condenou o clima de tensão vivido nos últimos meses por Venezuela, Colômbia e Equador. “São inaceitáveis as ameaças, as imprudências e as demonstrações de força desses três países”. Segundo Ferraz, que está à frente do Coadem há quatro anos e hoje se despede do cargo, "as tensões políticas não podem encontrar solução na beligerância, na demagogia, no populismo, na intromissão da soberania nacional e na inviolabilidade de qualquer dos estados irmãos da América do Sul".
“É chegada a hora de a América do Sul – disse Ferraz, que durante vários anos foi conselheiro federal da Ordem dos Advogados do Brasil – acabar com as bravatas e as suscetibilidades exageradas de alguns de seus dirigentes máximos”. Para ele, o momento é propício para que os países da região se comprometam com a realização da paz e do Direito. “Por esse motivo, os advogados, os Colégios e o próprio Coadem, como sentinelas da democracia, não podem se omitir”, afirmou Sergio Ferraz, sendo aplaudido pelos participantes da reunião.
Antes de passar o cargo a seu sucessor, Ferraz defendeu em seu discurso – todo feito em espanhol – que o Coadem promova um amplo estudo e um debate profundo sobre o populismo, alertando o continente sobre esse terrível perigo que corremos na atualidade. “Acreditamos que a nova presidência do órgão saberá enfrentar e superar esse grande desafio que nossa experiência nos impõe e nos impulsiona a denunciar para todos os países.
O vice-presidente nacional da OAB, Vladimir Rossi Lourenço, representou a entidade maior dos advogados brasileiros na reunião. Alem dele, esteve presente também o ex-presidente nacional da OAB e presidente da Comissão de Relações Internacionais do Conselho Federal, Roberto Busato:
Segue, na íntegra, o discurso do advogado Sergio Ferraz:
1 - Esa es una noche solemne, que marca las despedidas de un Presidente y los saludos y homenages a un nuevo dirigente de nuestra Entidad. El mensaje, que va concretar tales manifestaciones, debe y puede ser breve. En ese sentido colabora, expresivamente, la circunstancia de haber sido dirigido, en apartado, a los Presidentes de Colegios y Delegados, un relatorio específico de datos relativos a la gestión del Presidente que sale. Puédese entonces pasarse de pronto a la enunciación de algunos marcos alcanzados y de ciertas aspiraciones aún no realizadas. Para, al cabo, sugerirse, con base en la experiencia de cuatro años, determinados rumbos que, quizás, deban ser asumidos como líneas de actuación muy importantes, para que la presencia del COADEM, en el conjunto de entidades internacionales de la abogacía, se particularize y consolide.
2 - En los últimos años, COADEM ha sido un agente con voz activa siempre que en juego los superiores intereses de la abogacía (como institución) o de los abogados (como ejercentes individuales de la profesión legal). Es posible, incluso, que algunas veces esa determinación de hacerse el COADEM oído sin tardanzas haya sido interpretada de manera menos benévola, por nuestros pares. Pero después de treinta y cinco años de actuación gremial prudente mas enérgica, de casi cincuenta años de abogacía militante, de treinta años de magisterio jurídico, simplemente no sapemos ser diferentes: preferimos antes errar por acción, que por omisión.
Nuestra voz se ha hecho presente en los más variados ambientes. Solamente algunos ejemplos:
- en la OEA, Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ante la violación por el Ejecutivo y el Legislativo de Bolivia y de Paraguay, de prerrogativas de abogados y de sus Colegios;
- en Ministerios del Ejecutivo de Venezuela, por supresiones de la libertad de prensa;
- en la Presidencia de la República y en la Asamblea Constituyente de Bolivia y de Ecuador, por amenazas a la democracia y al Estado de Derecho, particularmente en la elaboración de las nuevas Constituciones boliviana y ecuatoriana (nuestras manifestaciones fueron inclusive publicadas integralmente en los periódicos de los referidos Países);
- en el Tribunal Constitucional de Ecuador, con referencia al juicio de inconstitucionalidad presentado por el Ejecutivo, contra la colegiación obligatoria gremial;
- en el Senado del Paraguay, para ofrecer, en audiencia pública, y en contactos personales con los Senadores, argumentos en favor de la colegiación obligatoria.
Y más: entre nosotros mismos, la voz de todos los participantes de COADEM se tornó audible y clara. Para tanto, pasamos a nos reunir con mayor frecuencia y regularidad; nuestra correspondencia se hizo multiplicada, tanto en la manera tradicional, como en la vía electrónica.
A todo eso cabe aducir los innumerables actos normativos editados, a que hace referencia el “Relatorio de Gestión”, precedentemente referido. Y también el hecho de que todos los Colegios, integrantes del COADEM, fueron visitados por el Presidente, por lo menos dos veces: o sea, COADEM siempre se dedicó a estar presente, personalmente, junto a todos los Colegios integrantes y sus dignos Presidentes.
3 - Pero hay también frustraciones. Para superarlas, el nuevo Presidente del COADEM habrá que ser, como seguramente será, dotado de tiempo, dedicación y apoyo integral de nosotros.
No conseguimos, hasta hoy, poner en funcionamiento nuestro Tribunal de Arbitraje, incluso porque algunos Colegios no completaron las designaciones que les incumbe.
Las Comisiones temáticas solamente ahora se ponen en condiciones reales de actuación, con el mecanismo de las reuniones virtuales electrónicas. Asi, la metodología está establecida: hay que empezar, ahora, el trabajo efectivo.
Nuestra carencia de recursos sigue siendo una dificultad extraordinaria. Las cuotas son insuficientes y no siempre se encuentran pagas en tiempo. Con eso, la Presidencia se queda en la dependencia o de los recursos personales de su titular, o con el apoyo del Colegio que lo indicó (o de los dos factores conjuntamente). En nuestra gestión fué aprobada una Resolución que establecia diferentes niveles de cuotas, con relación al número de abogados de cada país. Apesar de su aprobación por unanimidad, la Resolución no se implantó, porque los Colegios posiblemente consideraran excesivos los valores acordados. Es claro que implicado con ese problema existe el de la colegiación obligatoria (al cual retornaremos más adelante). Pero es imperativo que los Presidentes de Colegios se reunan con urgencia, en un cambio abierto y hasta mismo informal de opiniones, para que el tema tenga solución rápida y real. Todo eso en secuencia a una pregunta fundamental: hay, o no, interes sincero, en viabilizar un COADEM fuerte?
Queda inconcluso, pero en progreso, el problema de la sede en Foz de Iguazu. El ofrecimiento de un inmueble sigue confirmada. Mas la donación enfrenta dos obstáculos: la naturaleza jurídica de derecho público, del bien — esa es la parte fácil de la cuestión, porque basta obtener una ley de autorización, lo que no se muestra difícil; la naturaleza internacional del COADEM. Aca lá dificultad mayor. Creemos que la única solución, propiciada por la legislación de Brasil, es la siguiente: 1) efectivar la donación a la OAB regional; 2) la OAB, con sus recursos, construye la edificación, para ella misma y para COADEM, y nos atribuye, en comodato perpétuo, la parte edificada identificada a nuestros intereses y actividades. Creemos que en poco tiempo más los instrumentos jurídicos pertinentes podrán ser celebrados.
No se puede también olvidar que no hemos conseguido, hasta ahora, reincorporar la abogacia venezuelana en la gran familia de la abogacia de América del Sur, representada por COADEM. Acá, por cierto, la actuación del nuevo Presidente será coronada de éxito.
4 - Para allá de las frustraciones indicadas, que la nueva Presidencia sabrá superar, restan dos problemas muy serios, que COADEM habrá de enfrentar imediatamente, a nuestro aviso. Uno, de índole profesional; otro, de carácter político-institucional.
En la primera categoria está la questión de la coligación gremial obligatoria. Sin ella no se puede cogitar de Colegios fuertes, de contralor eficiente del ejercicio de la profesión; y sin estos datos no hay abogacía o abogados suficientemente considerados y seguros en el cumplimiento de sus responsabilidades, particularmente las de índole sócio-política. Por último, sin la ecuación colegiación—colegios fuertes, imposible hablarse de un COADEM consolidado en definitivo. Todavia ocurre que la colegiación gremial obligatoria sigue, hasta hoy, como triste excepción en nuestro Continente! Hay mismo un Colegio (Chile) que de ella no quiere oír hablar! Ya empiezan, por eso mismo, a aparecer amenazas concretas, en algunos paises en que ella existe: es lo que ahora ocurre en Ecuador y Bolivia. COADEM debría, creemos enfáticamente, iniciar un decidido movimiento de triple objetivo: i) obtener el apoyo de todos los Colegios, en pro de la colegiación gremial obligatoria; ii) luchar contra los intentos que existen o que aparezcan, del Ejecutivo y/o del Legislativo, con propósito de destrozar las conquistas ya alcanzadas; iii) hacer progresar las iniciativas legislativas que ya estén en curso, en el sentido de la colegiación. Si nos omitirmos en todo eso, permitiremos que nuestra profesión, misma, conozca un declínio fatal: no se puede pensar en Estado Democrático de Derecho, o en su defensa, sin una abogacía fuerte y solidamente garantizada.
En la segunda categoría asoma significación la crisis de la democracia representativa, en nuestro Continente. Lastimablemente estan lejos los tiempos despreocupados, en que vivíamos la alegria del término de las dictaduras que nos infelicitaban. Hoy estamos en medio de creciente ataque de populismos (y la actual crisis entre Colômbia, Ecuador y Venezuela no es más que una crónica de la muerte anunciada). Son ellos, o sea, los populismos, retomando, solamente por facilidad didática, dos anacrónicos rótulos, de izquierda o de derecha. Caracterízanse por diatribes a la libertad económica y/o la libertad política, por prédicas ideológicas y demagógicas de inspiración proteccionista y/o estatizante, con un protagonismo de nefastos o carismáticos caudillos. Para que consigan realizar sus fines, hablan de suspensión provisoria de garantias o derechos fundamentales, o de edición de nuevas constituciones que liberalizen los dueños del mando, de las siendas que la teoria de la separación de poderes impone, en pro de los ciudadanos. Con las posibles excepciones de Chile y Colombia, eso es lo que hoy ocurre entre nosotros. En Paraguay y Peru hay, en el horizonte, políticos demagógicos con gran aceptación popular. En Brasil, Uruguay y Argentina el protagonismo político no se marca de autoritarismo, pero casi siempre inclínase a atractivos populistas, que le puedan asegurar la manutención del poder. De Venezuela y Bolivia no hay que decir, que no sea de triste conocimiento general. Y sobre el proceso constituyente ecuatoriano COADEM ya se manifestó, de forma extremamente crítica. Si la ola populista continuar sin claras manifestaciones de rechazo, de parte de la abogacía, estaremos asumindo el riesgo de ver de nuevo dominado, por dictaduras, nuestro continente. Y, ahora, no propiamente con el uso de las armas o de los militares, pero con sinuosos instrumentos demagógicos.
Son inaceptables las amenazas, las imprudencias y las demonstraciones de fuerza, en la convivencia entre nuestros Países. Las tensiones, que hace pocos días involucraran Venezuela, Colombia y Equador, no pueden encontrar solución en la beligerancia, en la demagogia, en el populismo o en la intromisión en las soberanías nacionales y en la inviolabilidad de cualquiera de los Estados hermanos en América del Sur. No caben acá condenas aisladas a un o otro País o a sus dirigentes, por eso que todos estos, de una suerte o otra, contribuyeran para la confrontación ahora solo aparentemente suplantada.
Es llegada, definitivamente, la hora de cesar con los histrionismos, las bravatas y las suscetibilidades exageradas. Es llegado, por fin, el momento en que los Países de la América del Sur se comprometan, indisolublemente, con la realización de la Paz, por el Derecho. Un compromiso que no se quede satisfecho con acuerdos meramente retóricos o provisorios, un compromiso que solamente se tiene por exitoso si la Paz Continental deviene, de hermoso ideal, en realidad plenamente vivida.
Los abogados, sus Colegios y COADEM, como centinelas de la democracia, no pueden omitirse. Creemos, por todo eso, que, con urgencia, COADEM debe promover el estudio y el debate sobre el populismo, alertando al Continente sobre tan terrible peligro, que amenaza nosotros con los grilletes de la prepotencia. Quedámonos todavía confiados en que COADEM y su nueva Presidencia sabrán enfrentar y superar tan presionante desafío, que nuestra experiencia nos impone y nos impulsa a denunciar.
Señor Presidente: en sus honradas y sabias manos, en su diligencia y en su inteligencia confiamos los destinos del COADEM. Que la Providencia y la colaboración de todos nosotros no le falten, en su augusta misión.